La calle Capri es una de las calles de la Barriada San Ignacio, es de las más cortas teniendo un solo tramo cuyo recorrido va desde la calle San Francisco de Borja hasta un estrecho callejón al que se accede desde la calle Santa Joaquina de Vedruna y que llega hasta el fondo de la calle San Francisco de Borja tras hacer un giro de 90º en su recorrido.
La calle Nuestra Señora de Aránzazu es también una calle de un solo tramo, transcurre entre la calle San Ignacio y Santa Joaquina de Vedruna.
Ambas calles fueron denominadas, junto a las demás de la Barriada de San Ignacio, el día 20 de junio de 1969.
La denominación de Capri sigue en la línea de otras calles del barrio con calles dedicadas a ciudades italianas, en este caso se trata de la Isla de Capri, una isla de Italia localizada en el mar Tirreno, en el lado sur del Golfo de Nápoles, frente a la península Sorrentina. Ha sido un lugar de célebre belleza y centro vacacional desde la época de la antigua república romana.
Administrativamente, la isla pertenece a la región de Campania, provincia de Nápoles.
La calle Nuestra Señora de Aránzazu está dedicada a la Virgen de Aránzazu. Esta imagen es una talla de piedra de perfil gótico de diseño simple. En la mano derecha tiene una bola simbolizando el globo del mundo y con la izquierda sostiene al niño que se sienta en la pierna del mismo lado. Mide 36 cm. y pesa 9 kg. Describen el rostro de la imagen como el de una "aldeana sana de ancho cuello y generoso pecho".El niño no está tan bien trabajado como la figura principal; tiene un aire bizantino y lleva un fruto en su mano izquierda. Suele presentarse sobre tronco de espino blanco y con un cencerro al lado.
El Santuario de Nuestra Señora de Aránzazu es un santuario católico mariano situado en el municipio de Oñate, en Guipúzcoa, donde se venera a la Virgen de Aránzazu, patrona de esta provincia y que se había aparecido en 1496 sobre una mata de espinos.
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